En Ecos del futuro me encontré un mini-artículo interesante, se titula " ¿Por qué los jóvenes no escuchan a los mayores? " espero sea de su agrado :
Es barato dar consejos y por eso hay demasiada oferta. ¿A quién escuchamos?. Parece que deberíamos escuchar a aquellas personas que tienen más y mejor información que nosotros en el asunto considerado y a aquellas personas que podrían tener una visión menos sesgada que la nuestra en el momento de tomar una decisión. Un amigo arquitecto se queja de que sus consejos como arquitecto son con frecuencia ignorados por sus clientes. Y sin embargo, algunos estudios muestran cómo la gente a veces sigue consejos de personas que no tienen más información ni son más expertos.
Cuando pedimos consejo es otra cuestión. Cuando nos enfrentamos a la toma de una decisión, en el mismo momento de empezar a meditar en realidad ya nos hemos decantado por una opción y nuestro problema consiste normalmente en justificarnos. Una de las razones probables por la que pedimos consejo es buscando confirmación de que la decisión ha sido la correcta.
Pero la pregunta que me ha llevado a meditar sobre los consejos es, ¿por qué los adolescentes ignoran en general los consejos de los adultos más experimentados?. El hecho es tan universal y atemporal que clama al cielo una explicación. Quizás sea tan simple como que realmente los adultos no estamos interesados en hablar de temas realmente importantes con los adolescentes --y los profesores aún menos--. Pero podría además haber una razón evolutiva importante: el cúmulo de decisiones que hemos tomado en nuestras vidas nos han llevado hasta donde estamos en parte por suerte y en parte porque algunas decisiones resultaron acertadas en las circunstancias particulares --y probablemente irrepetibles-- en que fueron tomadas. Así que los consejos de una adulto probablemente tengan escaso valor en otras circunstancias. Además está el hecho del sesgo de sobrevaloración a posteriori de la calidad de una decisión. Así que los adolescentes hacen probablemente muy bien en no escuchar. Seguramente es la actitud más racional.
Por supuesto hay consejos y consejos. Advertir a un adolescente que no fume es un buen consejo que debería seguir, pero uno inútil porque no aportan ninguna información nueva. El adolescente ya sabe que no es bueno para la salud. De hecho Tim Hadford en su último libro The Logic of life nos cuenta cómo los adolescentes responden con cambios de hábitos a su sensación de riesgo. Que haya mayor disponibilidad de parches y chicles de nicotina, por ejemplo, podría implicar que haya mayor posibilidad de abandonar el hábito y por tanto menos incentivos para evitar empezar con el vicio. Aquí los adolescentes no están actuando racionalmente en el sentido que damos normalmente al término, pero sí que lo están haciendo en el sentido económico del término, justo como lo hacen los adultos.
La clave del asunto está en las distintas percepciones del riesgo. A cierta edad no hay montañas suficientemente elevadas ni valles suficientemente profundos que eviten el reclamo de inmortalidad de los genes --aunque la canción lo diga de una forma más bonita--
Referencias
Cuando publiqué este post estaba escuchando : Nuclear Assault - Defiled Innocence
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